​ Le contamos con honor la historia de nuestro ex Agente el "Gepetto" nariñense

​ Le contamos con honor la historia de nuestro ex Agente el "Gepetto" nariñense

Pasto, Nariño. Para hacer lo que este hombre hace con sus manos hay que tener verdadera madera.
  • policia-madera-talla-carpintero-exterior

Hernando Dorado Madroñero, nacido el 27 de mayo de 1956, oriundo del municipio de Tangua – Nariño, ingresó a la Policía Nacional el 01 de enero de 1976, culminando su carrera de Agente en el año de 1996 e incorporándose nuevamente a la institución como personal civil en las labores de ebanista, en el año 1997, llevando a fecha 39 años sirviendo a nuestra sagrada institución.Desde muy pequeño Hernando, se caracterizó por su habilidad del trabajo en madera, logrando con gran esmero y paciencia un altísimo grado de perfección en todos sus trabajos, característica propia de los artesanos nariñenses.Gracias a su esmero y dedicación, ha logrado desarrollar trabajos de escudos de nuestra Policía Nacional, Ejército Nacional, insignias, bastones de mando, inscripción de nombres policiales así como también báculos para la Iglesia Católica, lo que hace de nuestro artesano una persona digna de reconocimiento a nivel nacional e internacional.Un oficio aprendido en un pequeño taller de un tío, el ex Agente Hernando Dorado, adscrito al Departamento de Policía Nariño,  ha convertido este oficio en una obra maestra, realizando una gran cantidad de trabajos de talla en madera, tales como bastones para algunos Directores Generales, Subdirectores y un gran número de oficiales superiores que tienen en sus manos una parte de nuestro querido nariñense y por ende de nuestras raíces a través de sus pequeñas pero grandes artesanías de talla en madera.Para el año de 1995, en aquel entonces comandante de Departamento General Fortunato Guañarita Legarda (q.e.p.d) encomendaría al ex Agente, realizar un báculo especial para enviarlo al exterior. En ese entonces al ex Agente le inquietaba para quien era aquel trabajo realizado el cual lo diseño desarmable y portátil, para que su transporte fuese más fácil, elemento en el cual estaría incrustado un crucifijo,  confeccionado con madera de chonta, ébanos, naranjillo y finas incrustaciones de oro. Al pasar el tiempo, llegaría una noticia inesperada para Dorado Madroñero, un comunicado del Vaticano mediante el cual su Santidad Juan Pablo II, expresaba su gratitud y admiración por los presentes colombianos.Se queda corta pequeña reseña de la que en realidad es la de su talento  y sobre sus obras maestras,  pero gran historia de un hombre, que dentro de su humildad ha llegado al corazón de muchos a través de su oficio y su profesión como ebanista, obras talladas por su magno talento y la vocación de su trasegar por su  Policía Nacional de Colombia.