Gracias al arduo trabajo e interinstitucional, y de acuerdo a los elementos materiales probatorios, se logró demostrar la participación de este actor criminal, de haber sido el presunto cabecilla financiero del GDCO ‘La Inmaculada’, sucesor de alias “Nacho”, este último hermano de alias “Pipe”, y quién al parecer sería el encargado de lavar el dinero ilícito en establecimientos comerciales.

En operación articulada por el Departamento de Policía Valle y uniformados de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (DIJIN), bajo la coordinación de la Fiscalía General de la Nación, mediante diligencia de registro y allanamiento en el barrio El Retiro, se logró la captura por orden judicial de alias “Chamo”, por el delito de Terrorismo y concierto para delinquir agravado.

Alias “Chamo”, bajo el mando de alias “Pipe Tuluá”, fue el coordinador de los actos terroristas presentados en el 2024, relacionados con la quema de vehículos de transporte público en el municipio en mención. También, era el coordinador de las amenazas en contra de líderes políticos y sociales.

Alias "Chamo" tenía una trayectoria criminal de seis años, en la organización delincuencial, y sería hombre de confianza de alias "Pipe", principal cabecilla carcelario.

Está vinculado por los delitos de concierto para delinquir, actos de terrorismo e incendio; se encargaba del recaudo de dinero, producto de las extorsiones, a productos de la canasta familiar y otros ilícitos.

Delegado como el principal coordinador de las finanzas, encargándose del blanqueo de dinero a través de la implementación de fachadas comerciales, sumas superiores a 500 millones por mes.

Tendría a su servicio un grupo de sicarios para extorsionar, acciones terroristas y enviar panfletos intimidantes a comerciantes.

Estuvo vinculado en la incineración de los 8 vehículos en el municipio de Tuluá, el pasado mes de febrero del año 2024, por orden de alias “Nacho” y “Pipe”, así como coordinador de otros homicidios.

Le fueron incautados más de 20 millones de pesos en efectivo, un arma de fuego con munición, siete celulares, al parecer utilizados para realizar las exigencias económicas a las víctimas seleccionadas, agendas y más de 800 números de celular, 2 USB y elementos varios como cuadernillos y facturas.

El detenido, dinero y demás elementos incautados fueron dejados a disposición de la autoridad competente, a quien, al término de legalización de las audiencias, fue impuesta medida intramural en centro carcelario, por decisión de un juez de la República, por los delitos que se le imputan.

“Con este resultado, reafirmamos una vez más nuestro compromiso con la seguridad de los vallecaucanos, en especial de los tulueños, que vivieron una serie de acontecimientos por culpa de este grupo delincuencial”, afirmaron las autoridades.