Unidades del servicio de Policía orientado a las personas y a los territorios en medio de labores de patrullaje, registro y control, lograron la captura en flagrancia de una persona por el delito de Fabricación, Tráfico o Porte de Estupefacientes en el barrio Los Laureles de esta ciudad. La detención fue posible gracias a labores de seguimiento con un sistema de aeronaves remotamente tripuladas, (DRON).

El operativo se desarrolló, en la Calle 35 con Carrera 1J del mencionado barrio, donde gracias a nuestros drones se realizó un seguimiento fílmico a un hombre que presuntamente expendía sustancias alucinógenas.

Tras la evidencia registrada, se implementó un operativo que culminó con la captura del presunto delincuente de 29 años de edad. Al momento de su registro, se le halló en el bolsillo de su buzo una bolsa blanca que contenía 132 dosis de clorhidrato de cocaína, con un peso aproximado de 64 gramos.

De inmediato, se le informaron sus derechos como persona capturada y fue trasladado a las instalaciones de la Fiscalía General de la Nación para ser puesto a disposición por el delito de Tráfico, Fabricación o Porte de Estupefacientes.

La Policía Metropolitana de Barranquilla continúa fortaleciendo sus estrategias de vigilancia y control, haciendo uso de herramientas tecnológicas como los drones, para combatir el microtráfico y garantizar la seguridad ciudadana.

Igualmente, invita a la comunidad a seguir denunciando cualquier hecho delictivo que afecte la convivencia y tranquilidad, a través de la línea directa contra el crimen 317 896 5523, la línea 123 o la línea 165, habilitada especialmente para casos de secuestro y extorsión.

En una operación estratégica desarrollada en las últimas horas, unidades de la Seccional de Investigación Criminal e Interpol (SIJIN) de la Policía Metropolitana de Barranquilla, lograron la captura de un individuo conocido como alias 'Caretales', sobre quien recae una orden judicial por los delitos de homicidio agravado y tráfico, fabricación y porte de estupefacientes. Su captura fue realizada en el barrio Gaira de la ciudad de Santa Marta.

Según las investigaciones, alias 'Caretales' se desempeñaba como jefe de zona y hombre de confianza de alias 'Castor', principal líder del grupo delincuencial común organizado 'Los Costeños'. Su accionar delictivo se centraba en el municipio de Soledad, abarcando el suroriente y suroccidente de Barranquilla, donde presuntamente dinamizaba homicidios selectivos, almacenamiento de armas, tráfico de drogas, extorsión y despojo de tierras.

Este presunto delincuente, estaría involucrado presuntamente en el doble homicidio de un comerciante ocurrido en octubre de 2023 y otro registrado en marzo de 2024, ambos motivados por extorsión.

Es importante destacar que esta persona contaba con circular azul de Interpol, lo que subraya su perfil de interés para las autoridades internacionales. Adicionalmente, se confirmó que alias 'Caretales' fue patrullero de la Policía Nacional, solicitando su retiro voluntario en el año 2023.

Esta importante captura representa un golpe significativo contra la estructura criminal 'Los Costeños' y contribuye al fortalecimiento de la seguridad y la tranquilidad en el área metropolitana de Barranquilla.

La Policía Metropolitana de Barranquilla continúa desplegando todas sus capacidades investigativas y operativas para desarticular las organizaciones criminales y garantizar la convivencia pacífica en la región.

En un operativo de registro y control realizado a la altura del puente Pumarejo, vía que conduce de Santa Marta a Barranquilla, la Policía Metropolitana de Barranquilla con sus unidades de tránsito y transporte lograron la incautación de 118 paquetes marihuana. La sustancia estupefaciente fue puesta a disposición de la Fiscalía General de la Nación.

Los policiales lograron la captura de una persona de 38 años de edad, la cual viajaba en un bus de servicio intermunicipal con 60 kilos de marihuana que venían ocultos en 118 paquetes que se encontraban en la bodega del vehículo.

Este operativo se enmarca en las diferentes estrategias que venimos desarrollando para combatir la comercialización, el tráfico de estupefacientes y garantizar la seguridad ciudadana. Continuaremos trabajando para desarticular las redes dedicadas al tráfico local de estupefacientes y los delitos ligados al mismo.

La Policía Metropolitana de Barranquilla invita a la comunidad a denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con el tráfico de drogas a través de la línea de emergencia 123 o la línea contra el crimen 3178965523. Se garantiza absoluta reserva.

En cumplimiento de los planes de patrullaje y control, la Policía Nacional, a través de la patrulla de vigilancia número 21, logró la captura de un hombre de 40 años de edad, requerido mediante orden judicial por el delito de fabricación, tráfico o porte de armas de fuego y municiones.

La acción operativa se desarrolló en la calle 27, entre carreras 8 y 9 del barrio La Avanzada, donde las unidades policiales abordaron a un sujeto identificado como “Henry”, quien, al verificar sus antecedentes judiciales, se determinó que presentaba orden de captura vigente por este delito.

Cabe resaltar que 'Henry', recurrente actor delincuencial, registra cuatro sentencias condenatorias por los delitos de homicidio, secuestro extorsivo y hurto calificado y agravado, acumulando un historial criminal superior a los 18 años de prisión.

El capturado fue puesto a disposición de la autoridad judicial correspondiente, a la espera de que un juez de control de garantías defina su situación jurídica.

La Policía Metropolitana de Manizales continuará fortaleciendo las acciones de control e intervención en los diferentes barrios y comunas de Manizales y Villamaría, reafirmando su compromiso de garantizar la seguridad y la convivencia ciudadana.

Manizales y Villamaría, seguridad y civismo, nuestro orgullo.

La Policía Nacional, en coordinación con el Ejército Nacional, logra el hallazgo de 358 kilos de marihuana, los cuales eran transportados en un vehículo tipo camioneta.

La acción policial se llevó a cabo momentos en que se adelantaba la verificación de posibles rutas y corredores de movilidad de estupefacientes, por lo que se activa el plan candado entre la vía que conduce desde el corregimiento de Barragán al sector Río Verde, donde en una vía terciaria, hayan abandonado el automotor de color rojo.

Al realizar la inspección al platón, encontraron ocultos debajo de unas canastas plásticas un total de 589 paquetes herméticos con marihuana. Asimismo, al interior de la cabina, se hallaron 30 paquetes más.

Tras el hallazgo, se evita la comercialización de 358.000 dosis de marihuana, las cuales tienen un valor comercial de 1.790 millones de pesos aproximadamente.

Teniendo en cuenta lo anterior, se realiza la incautación de la sustancia estupefaciente y el vehículo, los cuales fueron dejados a disposición de la autoridad competente.

En marco de la estrategia institucional “Manizales y Villamaría, seguridad y civismo, nuestro orgullo” uniformados adscritos a la Subestación de Policía Alto Bonito, en coordinación con la Seccional de Carabineros y Protección Ambiental, lograron la captura de un hombre conocido como 'Tiguer', quien portaba un arma de fuego de manera ilegal.

La captura se llevó a cabo en el kilómetro 7 de la vía Manizales – Neira, donde los efectivos policiales interceptaron a este individuo mientras transitaba a pie. Durante el procedimiento de registro, se halló en el interior de un bolso un arma de fuego tipo revólver, calibre 38, marca Smith & Wesson, con dos cartuchos para el mismo.

'Tiguer' de 18 años de edad, fue dejado a disposición de la Fiscalía General de la Nación por el delito de fabricación, tráfico y porte de armas de fuego, donde después de su proceso de judicialización, un juez de control de garantías definirá si le impone medida de aseguramiento privativa de la libertad.

La Policía Metropolitana de Manizales reitera su compromiso con la seguridad y convivencia ciudadana, y continuará desplegando acciones estratégicas en los sectores urbano y rural para contrarrestar la delincuencia y garantizar la tranquilidad de todos los habitantes de esta jurisdicción.

Por: Emilio Gutiérrez Yance.

En una carretera de Colombia, sobre el asfalto caliente, el aire se volvió denso con la emoción de un momento único, un susurro de dolor y esperanza que marcará para siempre el alma de quienes lo vivieron. Un policía y un soldado se arrodillaban juntos, con las manos alzadas al cielo. Allí, entre el calor de esa arteria vial y el eco de una nación herida, sus oraciones se elevaban como un susurro colectivo, mezclándose con el viento que parecía intentar consolar un país que siente y llora la muerte de cada miembro de la Fuerza Pública por las balas de odio y maldad.

Ellos no se doblegaron ante el miedo ni ante el odio. Se doblegaron ante la memoria de sus compañeros caídos, ante la vida misma que juraron proteger, ante el territorio que llevan tatuado en el alma.

Dejaban escapar lágrimas silenciosas. A su alrededor, los ciudadanos—aquellos que alguna vez los vieron solo como autoridades—ahora los miraban como hermanos, hijos, padres y madres. La barrera invisible entre ellos y el pueblo se desdibujó en un mismo clamor de respeto y esperanza.

Cada policía que camina nuestras calles, cada soldado que vela en la penumbra de nuestras fronteras, no solo avanza en su misión: carga consigo el sueño de una nación que se niega a ceder. Y cuando uno de ellos cae, no es solo un uniforme el que se tiñe de sangre; es el alma entera de Colombia la que se desgarra, dejando una herida abierta en el corazón de todos.

No hay palabras suficientes para nombrar la tristeza. No hay consuelo capaz de llenar el vacío. Pero ellos no cayeron en vano. No murieron en el olvido. Su sacrificio se ha sembrado en la memoria viva de un pueblo que, pese al dolor, se niega a rendirse. Cada oración murmurada entre lágrimas, cada bandera izada en su honor, cada vela encendida en una ventana solitaria, es un acto de amor y rebeldía contra el olvido

Los asesinos quieren sembrar miedo. Pero en esta tierra, regada por sangre justa, germina otra semilla: la del coraje, la de la unidad, la de la promesa viva de un pueblo que no permitirá que le arrebaten sus sueños.

El señor general Carlos Fernando Triana Beltrán, director de la Policía Nacional, lo expresó con fuerza, con la voz templada por la fe y la convicción: "Con el apoyo de todo el pueblo colombiano, los doblegaremos". No fue un grito de guerra. Fue una promesa de justicia. Un eco que retumba en cada rincón de Colombia, recordándonos que ante la tragedia no respondemos con odio, sino con amor; no con derrota, sino con dignidad.

Hoy, cada colombiano que tiende la mano, que levanta su voz, que siembra bondad en su entorno, se convierte en un soldado de vida. Cada niño que pregunta "¿por qué?", nos recuerda que el sacrificio de nuestros héroes tiene un propósito: proteger el futuro.

En medio del dolor, aún resuenan las palabras del padre Diego Jaramillo Cuartas:
"Queremos expresar nuestra más sincera gratitud a los policías que día y noche velan por nuestra seguridad. Su dedicación y esfuerzo son faros en la oscuridad, guardianes silenciosos de la paz que anhelamos."

Hoy, Colombia se viste de luto, sí. Pero también de coraje. Cada lágrima es una promesa de memoria. Cada suspiro, un juramento de vida.

Que el vacío que dejan no sea olvido. Que el dolor que sentimos no sea en vano. Que su sacrificio sea semilla de un país más justo, más fuerte, más humano. Pero un país que honra a sus héroes jamás será vencido. Los nombres de quienes ya no están pertenecen ahora a la historia viva de un pueblo que se levanta sobre sus caídas, que no olvida, que siembra esperanza y libertad.