La ficha que coordinaba los movimientos financieros, dirigía las comunicaciones y conocía los secretos familiares de los cabecillas del ala armada del "clan úsuga", acaba de ser capturada por la Policía Nacional. Las unidades desplegadas hace 100 días en la región de Urabá, ubicaron a alias "la chola", en una vivienda rústica en la vereda Alto Rosal, en San Pedro de Urabá (Antioquia). La mujer de apariencia humilde, tenía la autonomía para decir quienes podían visitar o por lo menos contactar a los criminales más buscados de la organización. De igual manera, sostenía la nómina delincuencial y con un grupo de 30 hombres armados, ejecutaba asesinatos con el fin de apropiarse de tierras. Alias "la chola", hermana del segundo cabecilla del clan, alias "Gavilán", utilizaba correos humanos para llevar a los campamentos alimentos, medicamentos, vestido e informes financieros, a cambio recibía cartas con órdenes precisas sobre el manejo de propiedades, la distribución de los gastos ilícitos y la manutención del círculo familiar. La capturada deberá responder por los presuntos delitos de concierto para delinquir, homicidio agravado, desaparición forzada, desplazamiento y tráfico de armas. Ella habría ordenado la muerte de un hombre y el destierro de la familia, con el único propósito de arrebatarles una finca en la que su hermano, alias "Gavilán", estaba interesado y que finalmente tituló a nombre de un testaferro. La investigación adelantada por la Dirección Antinarcóticos de la Policía Nacional, permitió conocer parte de la riqueza ilegal que ha constituido el "clan úsuga" en los últimos 5 años en Apartadó, Turbo, San José de Mulatos y Necoclí (Antioquia). En cartas escritas por el propio "Gavilán", aparecen referenciadas estaciones de servicio, locales comerciales de venta de ropa, gigantescas hectáreas de tierra y un negocio de distribución a gran escala de licores, que según el mismo delincuente, hace dos meses arroja los recursos para conseguir alimento y vestido, frente al desabastecimiento que enfrenta por la ofensiva de la Policía Nacional. En varios documentos encontrados en los registros a la casa de alias "la chola", los cabecillas describen el nivel de afectación y los cuidados que asumieron desde que comenzaron las operaciones en su contra. Con precisión orientan la distribución de los gastos y ordenan los pagos mensuales de sicarios, extorsionistas y auxiliadores. En otros escritos, queda al descubierto la cultura ilegal que promueven los mismos cabecillas entre los jóvenes. Una de las misivas, firmada por otro hijo o un menor de edad cercano a alias "gavilán", pide al criminal dinero para comprar una motocicleta que le permita transportar adolescentes de la región, como única forma para conseguir novia o compañera. Dentro de las particularidades de alias "la chola", hay camisetas con la foto del abatido alias "Giovanny", hermano del máximo cabecilla de la organización criminal, que aparentemente eran distribuidas dentro de los pobladores, como una forma de obligarlos a rendirle una especie de tributo. Tres memorias usb y 10 documentos decomisados, son analizados por los investigadores, con el fin de identificar cerca de 50 contactos del cabecilla criminal y referenciar las propiedades para adelantar los procesos de extinción de dominio. En la ofensiva denominada "Agamenón", la Policía Nacional ha capturado 257 personas, realizado 56 operaciones de asalto, decomisado y destruido nueve toneladas de cocaína y erradicado 104 hectáreas de coca. Las acciones continuarán hasta dar con el paradero de alias "Otoniel", jefe del "clan úsuga" y de sus demás cómplices criminales.