El lupus es una enfermedad que se presenta cuando el sistema inmunitario ataca los propios tejidos y órganos del cuerpo, como las articulaciones, piel, riñones, células de la sangre, el cerebro, el corazón y los pulmones, de acuerdo a lo señalado por la Clínica Mayo.
Debido a que sus síntomas son similares a otras enfermedades, es difícil de diagnosticar, por lo que deben realizarse varias pruebas de laboratorio, radiografías, cardiogramas y biopsias. De la misma manera, el tratamiento dependerá de la sintomatología.
Aunque su signo más distintivo es una erupción cutánea en el rostro con una forma parecida a las alas abiertas de una mariposa sobre las mejillas, otras señales pueden ser lesiones que aparecen en la piel por la exposición al sol o dedos de los pies y manos que se vuelven blancos o azules ante el frío o por estrés.
Ese centro médico también indica que la enfermedad tiene una causa desconocida, aunque los factores de riesgo probables son la predisposición hereditaria, exposición al sol, infecciones o uso de medicamentos para la presión arterial, convulsiones o antibióticos.
La Dirección de Sanidad recomienda consultar al médico con regularidad, cuidarse del sol, realizar ejercicio, evitar fumar y seguir una dieta saludable que contenga vitamina D y calcio.