Con el propósito de cambiar en los manizaleños el concepto de la seguridad, la Policía Metropolitana de Manizales, inicia una serie de campañas de impacto como propuesta educativa para aplicar la autorregulación frente a los delitos que afectan la seguridad ciudadana, con dramatizados recrean las temáticas de en los delitos que más se ven afectados.El grupo de prevención de la metropolitana de Manizales, replantea la metodología educativa y preventiva para enseñar a ciertos grupos de ciudadanos en los delitos que afecta la seguridad ciudadana, como lo son: el hurto a personas en sus diferentes modalidades, el hurto a celulares, hurto a comercio y hurto a residencias, teniendo como referente el análisis criminológico en aquellos sitios más afectados, ya que la mayoría de los casos ocurren por las causas originadoras como los son: el factor oportunidad, el desconocimiento de la norma, la apatía por conocer los delitos, por el exceso de confianza, por la indiferencia social y lo más importante por no tener claro la autorregulación frente al concepto de seguridad. Esta innovadora y novedosa propuesta, inicia por las principales calles y carreras de los barrios de Alta Suiza, Palermo, Milán y la Francia, sitios donde el hurto a residencias es más frecuente pese a las causas originadoras, la Policía Metropolitana de Manizales ha capturado personas y grupos delincuenciales por estos hechos."La seguridad empieza por casa" es la campaña contra el hurto a residencias, cerca de 10 uniformados comprometidos con la seguridad en los barrios de la ciudad, sin título de actores pero con la firme convicción de trasmitir por medio de una escena casi que real, las herramientas, recomendaciones y el conocimiento específico para detectar y saber qué hacer cuando se enfrente a posibles intenciones de los delincuentes.Los uniformados policiales ya comenzaron a tocar aleatoriamente las puertas de algunas viviendas de los diferentes barrios solicitándole a sus moradores realizar en su casa la actividad y observar cómo en menos de 10 minutos los delincuentes desocupan la vivienda gracias al factor oportunidad y la excesiva confianza. Un total de 20 viviendas y más de 200 personas se dieron cuenta del procedimiento policial y de lo vulnerables que pueden ser.