Nuestro Agente, casado con la señora Aura Vásquez tuvo tres hijos Andrés, Carolina y Angie, sin embargo su amor paternal lo convirtió en el padre sustituto de otros niños, niñas y adolescentes que buscan un hogar con  el Instituto de Bienestar Familiar (ICBF).José Guillermo, un consagrado y ejemplar Policía a sus 26 años de servicio todavía siente la misma entrega por la comunidad como el primer día que ingresó a la Institución,  ahora como valor agregado a su vocación se ha convertido en un padre ejemplar, al colocar su propio hogar para brindar amor, protección y cuidado de niños y niñas que no tienen hogar transitoriamente ya sea por motivos de abandono, huérfanos o por cualquier otra situación de índole familiar.Por tal motivo, nuestro Agente y su esposa dedican su tiempo a abrir su brazos y hacer felices a estos pequeños quienes llegan a su hogar con risas y travesuras,  niños de cero meses hasta la edad de la adolescencia.Actualmente es padre sustituto de tres infantes de 14, 9 y 7 meses de edad, quienes son sus consentidos puesto que sus hijos biológicos ya son mayores de edad. "Nunca me arrepentiré de compartir mi labor como Policía y como padre sustituto con estos pequeñitos a los cuales les brindo mi protección, mi cariño, mi compromiso para sacarlos adelante con todo ese amor como el que tengo a mi hermosa Policía Nacional de Colombia"En este hogar han pasado varios niños pero a una de las que más recuerdan es  a Manuelita, una bebé que llegó a este hogar cuando tenía 3 meses de edad y duró aproximadamente dos años bajo la protección de nuestro Agente y su familia hasta que fue declarada en abandono por el ICBF y posteriormente dada en adopción a una familia de nacionalidad alemana."En el momento en que nos enteramos que se iba en adopción, nos dio tan duro, que era como sentir que nos arrancaban gran parte de nuestro corazón, ella desde su llegada había vivido con nosotros durante todo este tiempo al cuidado y cariño nuestro, eramos su familia sustituta,  pues era la bebé era en ese momento la consentida de nuestro hogar" afirma la familia Ortega Vasquez.Sin embargo, tiempo después a  pesar de todo lograron hacer contacto con Manuelita por medio de sus padres adoptivos, los cuales estaban muy agradecidos porque la bebé era muy independiente e inteligente y sobre todo muy sana; aun desde la distancia logran tener noticias de la pequeña, también en algunas ocasiones cuando sus padres adoptivos han tenido la oportunidad han permitido verla visitándolos en su casa.