La Dirección de Sanidad en Cundinamarca realizó una estrategia lúdica que armonizó momentos de diversión y aprendizaje en prevención en salud, fomentando cercanía entre los niños y sus padres, enseñando a los uniformados que el juego contribuye a reforzar los vínculos con sus hijos, reforzando la relación y vínculos entre los núcleos familiares y sensibilizando a los padres para que vean el mundo desde la perspectiva de sus hijos.

La primera parte de la campaña se enfocó en la prevención de enfermedades bucales en niños y adolescentes, la cual tuvo aplicación del barniz de flúor a menores de 17 años, en el marco de la estrategia ‘Generación Más Sonriente’. Por medio de juegos se enseñó cómo mejorar las prácticas de cuidado bucal, buscando reducir la presencia y severidad de la caries dental y otras enfermedades bucales en la niñez y juventud.

En la segunda actividad se realizó una desparasitación por parte de profesionales de medicina a los niños y jóvenes, generando conciencia en cada padre de familia que los niños son ‘Más Felices Sin Lombrices’. Esta actividad estuvo acompañada de danza y música enfocada en la correcta toma de medicamentos, entregando tabletas a cada padre de familia para suministrar a los menores.

Por último, se brindó, mediante los profesionales de salud mental, una actividad en la que las familias recibieron un rompecabezas, lo que les enseñó a solucionar problemas, idear recursos creativos y fortalecer sus vínculos. Esto ayudó a las familias a compartir la experiencia demostrando a sus hijos que mediante el trabajo en equipo se consiguen logros importantes y se resuelven dificultades.