En desarrollo del Plan de Choque ‘El que la hace la paga’, Construyendo Seguridad, la Policía Nacional a través de la Dirección de Investigación Criminal e INTERPOL “DIJIN”, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, logró la ubicación y destrucción en la vereda El Morrón del municipio de Briceño (Antioquia), de 81 kilos de explosivo Amonal perteneciente al Grupo Armado Organizado Residual ‘Estructura 36’.
Esta estructura al parecer es liderada por el sujeto conocido como ‘Cabuyo’, quien contaría con una trayectoria delincuencial de quince años ejercidos en las desmovilizadas FARC; dentro del Grupo Armado Organizado Residual ‘Estructura 36’ sería quien ordena acciones terroristas contra la Fuerza Pública y población civil, cobros extorsivos y homicidios por el no pago de las extorsiones, de igual manera se encontraría dedicado al narcotráfico en el departamento de Antioquia.
Los explosivos incautados estaban armados y listos para ser usados aparentemente en acciones terroristas en esta zona del país, con el fin de generar pánico y terror dentro de la comunidad, como retaliación a la operación desarrollada en el mes de octubre del año pasado, donde fueron neutralizados cinco integrantes del anillo de seguridad de la persona conocida como ‘Cabuyo’, entre ellos su compañera sentimental quien era conocida como ‘Jhoana’ y el jefe de seguridad conocido como ‘Rango´.
El material explosivo incautado fue destruido de forma segura por personal del grupo antiexplosivos de la Policía Nacional de Colombia.
Los 81 kilos de explosivos incautados estaban compuestos por los siguientes elementos:
- Cinco recipientes con ocho kilos de explosivos cada uno, con sistema de iniciación electrónico.
- Dos bultos de fibra cada uno con ocho kilos de explosivos cebado con cordón detonante.
- Una caneca con veinticinco kilos de explosivos amonal.
- Dos baterías de nueve voltios.
- Dos celulares conectados con cincuenta centímetros de cable dúplex cada uno.
Con este resultado operacional se logra la afectación contundente a esta estructura delincuencial, evitando nuevas acciones terroristas que puedan atentar contra la población civil y la fuerza pública en este sector.