En una ceremonia cargada de simbolismo y orgullo institucional, 36 jóvenes —16 mujeres y 20 hombres— realizaron su juramento de bandera como nuevos auxiliares de Policía en el Departamento de Policía Urabá. Este solemne acto marca el inicio de una vocación de servicio, donde cada uno de ellos asume con compromiso el deber de proteger a la comunidad y salvaguardar los principios que rigen la convivencia pacífica en nuestro país.
Estos nuevos integrantes de la Policía Nacional culminaron satisfactoriamente un proceso de formación e inducción que les brindó herramientas teóricas y prácticas para afrontar los retos propios del servicio policial. Durante su preparación, se reforzaron valores esenciales como la ética, la responsabilidad, el respeto y la disciplina, fundamentales para desempeñar su labor de manera ejemplar y cercana a las necesidades reales de la ciudadanía.
La incorporación de estos auxiliares fortalece significativamente la capacidad operativa y preventiva de la Institución en la región, especialmente en el marco del Nuevo Modelo del Servicio de Policía, una estrategia centrada en las personas, los territorios y la generación de confianza. Cada uno de estos jóvenes se convierte en un multiplicador de convivencia, comprometido con el bienestar colectivo y con una visión empática frente a las problemáticas sociales.
El Departamento de Policía Urabá celebra con orgullo este importante paso en la carrera policial de estos 36 auxiliares, convencido de que su entrega será clave para consolidar entornos seguros, solidarios y respetuosos de los derechos humanos.