La comunidad del barrio Juan XXIII de la comuna 13 de Medellín, fue testigo e informó a la línea de emergencia 123 sobre las precarias condiciones en las que habitaban un grupo de caninos en un criadero clandestino; por este motivo, uniformados del Grupo de Carabineros y Protección Ambiental llegaron al lugar y realizaron la aprehensión material preventiva de 55 caninos de diferentes razas.

Con la visita de control de los funcionarios de la Policía Nacional y la Inspección Animal de Medellín, el propietario autorizó el ingreso a la vivienda, hallando a estos caninos en malas condiciones de salud y salubridad. Se evidenció que los animales vivían y comían en medio de sus heces.

Cada uno de los 55 caninos fueron atendidos por el médico veterinario de la inspección, diagnosticándoles patologías como dermatitis, desnutrición y problemas oculares.

Los animales fueron dejados bajo protección y cuidado del Centro de Bienestar Animal La Perla.