La Policía Nacional a través de la Dirección de Carabineros y Seguridad Rural, en coordinación con el Ministerio de Minas, las Fuerzas Militares y la Fiscalía General de la Nación, realizó una importante intervención a 5 unidades de producción minera en el municipio de Magüí Payán (Nariño), principalmente en la zona aledañas a los ríos Magüí y Patía, en donde se destruyeron 5 excavadoras y 1 motor.
Las investigaciones duraron un año y permitieron a los investigadores de la Policía Nacional en coordinación con la Fiscalía General, recolectar las pruebas suficientes para solicitar una orden de registro y allanamiento que se materializó en zona rural de Magüí Payán, lugar a donde llegaron 4 helicópteros con 180 hombres y mujeres de la fuerza pública y CTI de la Fiscalía, para destruir las 5 excavadoras mediante el uso de explosivos por parte de expertos de la Policía Nacional.
En estas unidades de producción minera se estarían generando cerca de 30 kilogramos de oro al año, el cual tendría un valor comercial de 6.800 millones pesos aproximadamente, gracias a esta operación el grupo armado organizado residual ‘Oliver Sinisterra’ dejaría de percibir cerca del 20% de este dinero, el cual equivaldría a 1.360 millones de pesos aproximadamente, los cuales eran obtenidos mediante exigencias económicas a los mineros de la zona, con la finalidad de permitirles el ejercicio de la actividad minera. Así mismo, la afectación económica por la destrucción de la maquinaria sería de aproximadamente 1.300 millones de pesos, interrumpiendo de manera inmediata la producción de oro ilegal y la destrucción de los recursos naturales de esta zona del departamento de Nariño.
Por otro lado, en este departamento también tienen injerencia el ELN por medio del Frente Comuneros del Sur al mando de alias HH o Gustavo, y el grupo armado organizado residual Bloque Occidental Alfonso Cano, este último junto al GAO-r Oliver Sinisterra, tienen una marcada influencia en el denominado Triángulo de Telembí, conformado por los municipios de Barbacoas, Magüí Payán y Roberto Payán, zona estratégica que ha sido escenario de múltiples confrontaciones armadas por el control territorial y las rentas criminales que allí se generan.
En la actualidad estos tres actores criminales mantiene cruentas disputas por controlar las economías ilegales de la minería ilícita, la deforestación, el narcotráfico, y el apoderamiento de hidrocarburos, es importante mencionar que los últimos dos delitos tienen una convergencia catastrófica para el medio ambiente y la seguridad rural del pacífico nariñense y la frontera con ecuador, ya que del Oleoducto Transandino se extraen hidrocarburos que luego de ser refinados de manera artesanal, producen combustible apto para ser utilizado como insumo en la producción de clorhidrato de cocaína y para hacer funcionar la maquinaria amarilla y motores utilizados en la minería ilícita.
En lo corrido del año 2021 la Dirección de Carabineros ha logrado la incautación y recuperación de 3,5 millones de galones de hidrocarburos en el departamento de Nariño, entre estos casos operativos se destacan seis operaciones coordinadas, enfocadas en mitigar el hurto de combustibles del Oleoducto Transandino, logrando recuperar e incautar más de 1 millón de galones, que no sólo coadyuvan en la disminución de la producción de cocaína, sino que también contribuyen en la protección de los recursos naturales y el patrimonio económico del país.
Los peritos ambientales de la Dirección de Carabineros, lograron establecer que en el proceso de producción del oro se estarían utilizando 12.5 kilogramos de mercurio mensuales, cantidad suficiente para contaminar un aproximado de 6,2 millones de metros cúbicos de agua, envenenando a decenas de especies de peces, reptiles, aves y demás fauna y flora silvestre que habita en esta zona. Además, esta actividad ilegal deforestó carca de 40 hectáreas de bosque, causando un grave daño al medio ambiente, teniendo en cuenta que estas hectáreas son capaces de absorber 1.000 toneladas de dióxido de carbono al año.
Los cultivos ilícitos han sido uno de los fenómenos que más ha aportado a la deforestación en el departamento de Nariño, se estima que para el año 2020 en Nariño se deforestaron cerca de 5 mil hectáreas de bosque, siendo la minería ilegal y los cultivos ilícitos los principales dinamizadores de este delito, en ese mismo año se reportaron 30.751 hectáreas de cultivos ilícitos, sin embargo, la minería ilícita tiene un efecto más devastador, ya que no solo aumenta las cifras de deforestación, sino que también, contamina los recursos naturales como el agua, el suelo, la flora y fauna silvestre.
El fenómeno de la deforestación causado la por la minería ilegal, también destruye los ecosistemas acuáticos, ya que produce sedimentos que afectan ríos como Magüí y Patía, este último considerado como el segundo río más caudaloso del litoral pacífico, y de gran importancia ya que es medio transporte, fuente de alimento y trabajo de centenares de familias que viven en las riberas de estos importantes afluentes hídricos.
La Dirección de Carabineros de la Policía Nacional continuará desplegando todas sus capacidades operativas para capturar a las personas se benefician de la minería ilícita, destruyen los recursos naturales y afectan la convivencia y seguridad ciudadana generando miedo y zozobra en estas comunidades rurales.