La soledad y los arbustos de la vía Cañaveral- Zipacoa fue el escenario perfecto para que dos sujetos salieran de la maraña e intimidaran con arma de fuego a su víctima y la despojaran de su motocicleta y su teléfono celular.
La rutina de Cesar Jaramillo Escobar cuando tenía que salir de la ciudad de Cartagena hasta la zona norte del departamento de Bolívar, era salir a las cuatro de la tarde, para pasar revista a los puntos de recaudos de SuperGiros, empresa donde labora como supervisor.
Cuando el reloj marcaba las 6 y 30 de la tarde, Cesar, salió del municipio de Villanueva en su motocicleta como era de costumbre hasta el corregimiento de Zipacoa con el objetivo de recoger el dinero producto de las ventas.
Pero esta vez no alcanzó a llegar a su destino, puesto que en el camino fue interceptado por dos sujetos uno de ellos conocido en el mundo del hampa como el “benito” que lo intimidó con arma de fuego despojándolo de su teléfono celular y de la motocicleta.
Con la impotencia en su rostro y la voz quebrantada, cesar, se dirigió hasta las instalaciones policiales del municipio de Villanueva con el fin de poner en conocimiento lo que le había sucedido.
La activación de la Red de Apoyo del municipio, arrojo una información que fue de vital importancia para dar con el paradero de la motocicleta. Un ciudadano alertaba del paso de una moto con características similares a la hurtada, por la trocha el colorado de dicha población.
De inmediato las patrullas activan el plan candado en la zona descrita por el informante con el fin de dar con el paradero del malhechor y la motocicleta.
Al llegar al corregimiento, los uniformados observan a dos sujetos que se movilizaban en una motocicleta y estos al sentirse acorralados por los policiales abandonan la moto yéndose a la huida por una zona enmontada. De inmediato se desencadenó una persecución durante varios minutos, que finalizó con la captura de un sujeto conocido como “benito”. Sin embargo, su secuaz corrió con mejor suerte, puesto que logró escapar del cerco policial.
En medio de la requisa los uniformados le hallaron al detenido un teléfono celular marca Samsung j-7 de propiedad de la víctima.
Dos horas después de lo sucedido, Cesar Jaramillo Escobar, recibió una llamada por parte de la patrulla del cuadrante, para avisarle que se acercara hasta la Estación de Policía para hacerle entrega de su teléfono celular y de la motocicleta.
Cesar, no cabía de la dicha. Sin embargo, mucho más alegre se le notó cuando el Intendente, Dagoberto Rodríguez Balseiro, Subcomandante de la Estación de Policía de Villanueva, le hizo entrega del celular y la moto.
En consecuencia, el capturado fue dejado a disposición de la Fiscalía 24 local de Santa Rosa por el delito de hurto calificado.