En el Cesar se consolida una policía más cerca del ciudadano

Patrullero cumple el sueño de tener casa propia a adulto mayor en situación de calle.

El patrullero Alex Pérez, lleva 13 de sus 32 años trabajando en la Policía Nacional, a la Subestación Badillo fue traslado hace dos años y medio, donde se ha destacado por su trabajo comunitario, en procura de ayudar a los más necesitados. En este corregimiento de Valledupar habita el señor José Federico Arzuaga, conocido cariñosamente como Relámpago, el cual es una persona de más de 70 años de edad, iletrado, natural de Cartagena, quien desde hace 20 años llegó a esta localidad, donde se gana el sustento haciendo oficios varios, como cortar césped, barrer calles, hacer mandados…

Relámpago es una persona querida por la comunidad, en especial por el Patrullero Pérez, quien se preocupó por el bienestar de este adulto mayor, quien no cuenta con ningún familiar conocido, además que con dificultad apenas consigue lo básico para su sustento y vive en un improvisado cambuche.

Ante esta situación, López tomó la decisión de ayudar a este septuagenario, convirtiéndose en el hijo que nunca tuvo, para lo cual realiza las gestiones, con las cuales pudo vincularlo al programa de comedor comunitario “Abuelitos Felices”, donde diariamente comenzó a recibir su alimentación.

El sueño de Relámpago era tener su propia casa, así se lo hacía saber constantemente a López, en las conversaciones que ambos tenían en las frecuentes visitas del uniformado a su amigo.

Hace unas semanas Relámpago recibió unos recursos provenientes de un subsidio, pero los nueve millones de pesos no eran dinero suficiente para comprar un lote y construir una vivienda, además no tenía experiencia en este tipo de negocios y temía que alguien se pudiera aprovechar de su desconocimiento.

Ante esto busca a su amigo, el Patrullero López, quien estuvo presto a colaborarle, para lo cual lo asesoró para adquirir un terreno, el cual consumió más de 70% de los recursos, dejando muy poco dinero para construir, al notar la desilusión de adulto mayor, al ver diluirse su sueño de casa digna, López resuelve convocar a comerciantes y comunidad en general para que donaran materiales y él, en compañía de otros policías de la Subestación de Badillo, en sus tiempos libres, se quitaban el uniforme para colocarse el overol y ayudar en la construcción.

De esta manera en 15 días ya estaba construida la vivienda propia para Relámpago, la cual, y gracias a la gestión del patrullero López, fue amoblada y entregada a este emocionado hombre, quien con lágrimas en los ojos agradeció a su ángel vestido de policía, por hacer realidad su sueño y el patrullero López se comprometió a que sin importar donde esté laborando, siempre estará pendiente de su amigo.