En operación “atlas” capturamos a ‘samir’ el terror de la comuna 13 de Medellín

Sería el responsable de un enfrentamiento armado que dejó varios muertos en esta zona.

En desarrollo del plan de choque, más cerca al ciudadano, la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá en coordinación con la Fiscalía General de la Nación y la Alcaldía de Medellín, en desarrollo de la operación “atlas” dio captura de quien es conocido en el mundo criminal como “samir o Valderrama”, presunto cabecilla del grupo delincuencial “el salado”, que delinque en la comuna San Javier de la ciudad de Medellín.

Las acciones policiales se desarrollaron en la carrera 51C con calle 81, vía pública de la ciudad de Medellín, cuando se trasportaba en un vehículo de su propiedad, donde funcionarios adscritos a la seccional de Investigación Criminal e Interpol SIJIN y la Seccional de Inteligencia Policial SIPOL, mediante actividades de investigación y seguimiento ubicaron y dieron captura a “samir o Valderrama” de 41 años de edad, cabecilla del grupo de delincuencia común organizado “el salado”, este alineado a la ODIN “robledo”, con accionar delictivo en los barrios San Javier y el Salado, sectores denominados como pedro J, la curvita, la 115, el 6 y cuatro esquinas de la comuna 13 de la ciudad de Medellín, quien se encontraba en el cartel de los más buscados y por quien ofrecían una recompensa de hasta 20 millones de pesos por información que condujera a su captura.

Es de anotar que al momento de su captura “samir” se identificó con una cédula a nombre de otra persona y presentaba algunos cambios en su fisionomía, utilizando un peluquín y abundante barba, intentando evadir así el accionar de las autoridades.

Este sujeto según las investigaciones anteriormente pertenecía al grupo delincuencial “betania” en donde después de una división interna inició una confrontación armada con su ex jefe conocido como “juancito” (capturado) ex cabecilla de esta estructura criminal, pasando a ser máximo cabecilla del grupo delincuencial “el salado”, allí sería quien coordinaba el cobro a las empresas que distribuyen productos alimenticios y de la canasta familiar, gas propano,  insumos de panadería  y  diferentes empresas  repartidoras de productos empacados, en tiendas de barrio en este sector.

Se presume que es quien ordenaba el cobro de extorsión a una ruta de buses de la empresa Conducciones América, con un valor de 15 mil pesos diarios por vehículo; indagaciones indican que poseía nexos con integrantes del grupo delincuencial “eduardo santos” y “los paracos o el llano” del barrio La Loma en el corregimiento de San Cristóbal, sosteniendo rivalidad con integrantes de los grupos delincuenciales “la agonía” y “el chispero” por el control de la fuente de financiamiento ilegal.