“Mi General Édgar Yesid Duarte Valero se ha convertido en luz para la Sanidad Policial y su memoria y nombre quedaron en el corazón de todos“, con esta afirmación el señor Brigadier general Manuel Antonio Vásquez Prada, Director de Sanidad de la Policía Nacional, resaltó la vida, legado y sacrificio del señor Brigadier general Duarte Valero en unas sentidas palabras expresadas durante la Eucaristía que se celebró en la mañana de hoy viernes 26 de noviembre a diez años de su fallecimiento. Como invitadas especiales a la Eucaristía asistieron la señora Susy Abitbol, esposa del señor Bg. Duarte Valero y su hija Viviana además de varios familiares cercanos. En representación de la Dirección de Sanidad también asistieron la señora Coronel Sandra Patricia Pinzón Camargo, Subdirectora de Sanidad, y algunos Oficiales, Suboficiales, miembros del Nivel ejecutivo, Patrulleros y no uniformados en representación de todo el personal que labora en este Establecimiento de Sanidad Policial Primario (ESPRI) que lleva su nombre desde el 10 de septiembre del año 2015.

El señor Brigadier general Manuel Antonio Vásquez Prada resaltó, además, el hecho que su nombre está plasmado en el Establecimiento de Sanidad Policial que atiende más población y cobertura en Bogotá, y en el país, y tiene a cargo la misión de garantizar la salud de todos los usuarios. Afirmó que el Duarte Valero, como comúnmente se le llama, se ha convertido en una luz de vida y esperanza, hecho que se evidenció, aún más, desde que se inició la pandemia por cuanto el ESPRI Bg. Édgar Yesid Duarte Valero fue, y sigue siendo, el epicentro de la vacunación contra el Covid-19 para los usuarios de Bogotá.

Tres cosas que nunca pueden dejar de trascender, destacó el señor Brigadier general Manuel Antonio Vásquez Prada en su intervención refiriéndose a un texto rescatado el día de la muerte del General Duarte Valero y escrito de su puño y letra: la fe, la esperanza y el amor. Por su parte, la señora Susy Abitbol y su hija Viviana expresaron unas conmovedoras palabras a los asistentes a la Eucaristía, destacándose su agradecimiento y gratitud por esta ceremonia religiosa como homenaje a su esposo y padre y haciendo un recuento de su vida y obra. Compartieron, además, algunos recuerdos que conservan como un tesoro de amor, enseñanza y sabiduría.

Al final de su intervención, y como un gesto de gratitud para la con la Dirección de Sanidad, obsequiaron dos pares de muletas para beneficio de los usuarios del Servicio de Rehabilitación.

El acto culminó con una ofrenda floral en el busto que se encuentra en la entrada del ESPRI Bg. Édgar Yesid Duarte Valero y que es visitado por cientos de usuarios todos los días.