La prevención del cáncer de cuello uterino inicia con la vacunación contra el VPH

El cuarto cáncer más frecuente en mujeres puede prevenirse si se diagnostica a tiempo y se trata con prontitud.
  • El cuarto cáncer más frecuente en mujeres puede prevenirse si se diagnostica a tiempo y se trata con prontitud.

El cáncer de cuello uterino es el más frecuente en la mujer, más del 90% de los casos con mujeres fallecidas tuvieron lugar en países con ingresos bajos y medianos. Según la Organización Mundial de la Salud, las mujeres con VIH tienen 6 veces más probabilidad de padecer esta enfermedad que aquellas que no adquirieron el virus.

Este cáncer se produce en las células del cuello uterino, la parte inferior del útero que se conecta con la vagina. De acuerdo a la Clínica Mayo, existen dos tipos: carcinoma epidermoide, células escamosas que recubren la parte externa del cuello uterino y se proyecta hacia la vagina; y el adenocarcinoma, células glandulares en forma de columna que recubren el canal cervical.

En la mayoría de los casos, esta enfermedad es más frecuentemente provocada por el virus del papiloma humano (VPH), la causa de infección vírica más habitual del aparato reproductor.

Algunos síntomas del cáncer de cuello uterino en estadios tempranos son: manchado irregular entre periodos menstruales en edad reproductiva, manchado o sangrado posmenopáusico o tras mantener relaciones sexuales, o aumento de flujo vaginal, incluso con mal olor.

Otros síntomas más intensos pueden ser dolor de espalda, piernas o pélvico, pérdida de peso y apetito, cansancio, flujo maloliente o molestias vaginales, e hinchazón en una o ambas piernas. Además, pueden aparecer otros síntomas, si el cáncer se ha extendido a otros órganos.

Prevención

El cribado permite detectar lesiones precancerosas en estadios que pueden tratarse fácilmente. La Asamblea de la Salud de la mencionada organización adoptó en 2020 un enfoque integral para prevenir y controlar el cáncer de cuello uterino, intervenciones a lo largo de la vida.

En la prevención primaria, para niñas de 9 a 14 años, se realiza la vacunación contra VPH, educación sexual y promoción del uso de preservativos. En la prevención secundaria, para mujeres mayores de 30 años, o mayores de 25 si tienen VIH, se les realiza prueba de cribado y tratamiento inmediato si es positivo para VPH. En la prevención terciaria, para todas las mujeres, se realiza tratamiento del cáncer invasivo con cirugía, radioterapia, quimioterapia y cuidados paliativos.

Otros factores de riesgo, relacionados con el VPH, pueden incluir la cantidad de parejas sexuales, actividad sexual a temprana edad, otras infecciones de transmisión sexual, y un sistema inmunitario debilitado. También se cuenta con el tabaquismo y la exposición a medicamentos para la prevención de abortos espontáneos.

Para reducir el riesgo del cáncer de cuello uterino y otros cánceres relacionados con el VPH, consulte a su médico para la aplicación de la vacuna contra este virus. Realice pruebas de Papanicolau de rutina a partir de los 21 años, las cuales pueden detectar afecciones precancerosas. Mantenga relaciones sexuales seguras y tome medidas para prevenir infecciones de transmisión sexual.