Las labores de interacción entre el grupo de transformación de conflictos sociales de la Policía Nacional y la comunidad de los diferentes municipios de Bolívar, dan muestras de que con el diálogo y la tolerancia se puede alcanzar mejores resultados de convivencia, paz y armonía.

Teniendo en cuenta esas labores de disuasión con el fin de que los pobladores confíen en su policía, una llamada al 123 alertó a los uniformados sobre una situación de un hecho al interior de una vivienda, en donde una familia discutía fuertemente y en donde estaba latente la amenaza de irse a golpes entre los mismos integrantes de ese hogar.

Vecinos, sabidos de que la Policía también interviene en estos casos, gracias a las campañas que se han adelantado en las últimas semanas, puso en conocimiento la situación y se logró la intervención requerida. Al final, una situación de difícil armonía, se convirtió en un campo de paz y diálogo y cero confrontaciones.

Se enfatizó también en evitar la violencia contra las mujeres, bien sea por maltrato físico o sicológico. Se hizo un acompañamiento a muchas de ellas que requerían mayor información y se les indicó como acudir a la Policía Nacional en caso de ser víctimas de algún tipo de violencia.

Esta y otra serie de actividades realiza de manera permanente los miembros de la Policía de Bolívar en varias poblaciones, quienes además de hacer cumplir el aislamiento social para prevenir el coronavirus, nunca se han descuidado las otras áreas. Por ejemplo, con el personal de Policía de Infancia y Adolescencia se llegó a diferentes barrios de El Carmen de Bolívar para recordar a la comunidad la importancia de velar por la seguridad de los niños y niñas y velar por sus derechos.

De la misma manera, en la toma a esta población de los Montes de María, con el personal de la Seccional de Tránsito y Transporte de Bolívar, se impactó de manera positiva entre conductores de vehículos (carros, motos y bicicletas), haciendo referencia a las recomendaciones relacionadas con el respeto a las señales y normas a la hora de ir manejando. Se les animó sobre tener todos sus papeles en reglas y respetar de primera mano al peatón y así disminuir la accidentalidad.

De otro lado se dictaron charlas sobre cómo mantener el orden público, la paz y la convivencia social, destacando que lo más valioso para el ser humano es la vida.