Comprometidos con el trabajo comunitario y con los niños y niñas pertenecientes a sectores vulnerables, uniformados de la Policía organizaron las primeras comuniones para 300 niños del oriente de Cali. Posteriormente al acto litúrgico se les efectuó una fiesta a los niños quienes pudieron asistir sus padres para un total de 1.200 asistentes a quienes se les ofreció almuerzo, un show musical y un obsequio para los menores. Es de anotar que la catequesis la efectuaron durante seis meses, el proceso de inscripción y preparación fue realizada por los uniformados quienes fueron de casa en casa motivando a los padres y madres cabeza de familia de escasos recursos para que permitieron que sus hijos se vincularan a los niños a esta actividad que se viene adelantando desde hace nueve años, beneficiando a niños, niñas y jóvenes de diferentes sectores.