Residentes de un barrio denunciaron a un habitante de la calle quien tenía en su poder cuatro canes grandes de raza criolla, que debido a su comportamiento estaban causando estragos, atemorizando a niños y adultos que transitaban por el barrio.Efectivamente al trasladarse al lugar nuestros Policías observaron a los animales que andaban libremente haciendo de las suyas entre la basura y ladrando a cuanto transeúnte se tropezaban; para darles un tratamiento adecuado se solicitó el apoyo del Grupo de Protección Ambiental y ecológica.Con mucho cuidado y luego de recorrer varias calles, los canes fueron atrapados uno a uno sin ser lastimados el cual fueron trasladados a un centro veterinario para revisar su estado de salud.Los animales pposteriormente fueron enviados a un albergue canino donde serán dados en adopción, garantizándoles entre tanto una mejor calidad de vida.