En la ciudad de Bogotá, la Policía Nacional de Colombia, en articulación con la Unidad Policial para la Edificación de la Paz y el Comando General de las Fuerzas Militares, llevaron a cabo una emotiva conmemoración del 9 de abril, conocido como el “Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas del Conflicto Armado Interno”. Esta fecha se convierte en un momento crucial para recordar y dignificar a los más de 9.888.182 colombianos que han sido afectados por hechos víctimizantes. La actividad realizada no solo busca rendir un homenaje a quienes han caído, sino también simbolizar la esperanza y la resiliencia de un país que clama por la paz y la erradicación de la violencia.
La conmemoración se centró en el profundo compromiso de la Fuerza Pública por mantener viva la memoria de aquellos que han dado su vida en el cumplimiento de su deber. A través de esta acción, se envía un mensaje claro al pueblo colombiano: “Su ausencia jamás será olvido”. Este compromiso se traduce en acciones concretas que buscan reconocer y apoyar a los integrantes de las Fuerzas Militares y de la Policía, así como a sus familias, que han sido víctimas del conflicto armado interno, reafirmando así el papel fundamental que juegan las instituciones en la construcción de una sociedad más justa y pacífica.
En este sentido, la Policía Nacional reafirma su misión de trabajar incansablemente para garantizar los derechos de las víctimas y contribuir a la reconciliación del país. Las conmemoraciones, más que un acto simbólico, son una llamada a la acción para seguir construyendo un futuro donde prevalezca la paz y el respeto por la vida. La memoria colectiva se convierte en una herramienta poderosa para no repetir los errores del pasado y para honrar a quienes han luchado por un mejor mañana, fortaleciendo así el tejido social y promoviendo un ambiente de solidaridad y esperanza.