Para el 30 de diciembre del año 2019 mientras las personas disfrutaban en familia de las fiestas de fin de año en Caquetá y algunos funcionarios gozaban del descanso que para esos días ofrecemos, una de nuestras uniformadas oriunda del municipio de Apartadó Antioquia se enfrentaba a un nuevo reto en su carrera como oficial, liderar una Estación de Policía ubicada en este municipio del norte del departamento con múltiples necesidades en materia de seguridad e inversión social. No es un secreto que este municipio ha sido afectado por las barbaries de la guerra, donde han fallecido muchas personas y otras han quedado marcadas de por vida con secuelas físicas y psicológicas, entre ellas, varios policías. El último ataque se presentó el 3 de junio del año 2012, cuando uniformados de la estación de Policía trasladaban a una mujer en estado de gestación al centro de salud en compañía de su mamá, y fueron atacados con disparos de armas largas dejando como resultado la muerte de dos de nuestros hombres, la mujer en embarazo, la mamá y el bebé.
Desde su llegada a la estación de policía, la teniente Ana María Castaño Molina empezó a liderar y desarrollar los procedimientos con enfoque comunitario, guiados por los tres pilares de la institución (una policía para la gente, que se transforma para servir mejor y piensa en sus policías); con esa concepción originó bonitas iniciativas atendiendo el clamor de la comunidad en este momento de crisis económica y de pandemia, realizando la entrega de mercados, acciones de prevención y educación mediante perifoneo sobre el COVID – 19, llevando dinámicas a niños y niñas que frente a sus viviendas bailan al ritmo de las canciones infantiles en compañía de sus cuidadores y actividades de solidaridad por el bienestar y la tranquilidad de todos los habitantes de La Montañita.
En cada actividad ejecutada nuestra oficial dejaba ver su lado solidario, respetuoso, amable y generoso, no solo con la comunidad también con los funcionarios bajo su responsabilidad distribuyendo elementos de bioseguridad como guantes y tapabocas para protegerlos contra la amenaza invisible que está apagando la vida de muchas personas en el mundo. De igual manera, su liderazgo se refleja en la calidad del servicio que brindan sus policías a la comunidad, excelentes comentarios e imagen positiva ha generado en la localidad, una muestra de valor y orgullo que representa al género femenino del país.
Esta es la clara muestra de la verdadera labor y liderazgo de una mujer policía, velar por la protección de la vida, honra y bienes de todas las personas sin discriminación alguna en armonía con la protección de los recursos naturales y el medioambiente. Su vocación la ha convertido en un ejemplo para muchas mujeres que han tenido que dejar a su familia para cumplir sus objetivos y sueños. En representación de las mujeres valientes y luchadoras que portan el verde oliva, sin importar las circunstancias ofrecen una sonrisa y la mejor actitud en cada acción que realizan por el bien de la humanidad.
Apenas inicia un camino prometedor para transformar la forma de pensar y actuar de muchos habitantes de La Montañita que han vivido en carne propia momentos desesperanzadores a causa de la violencia, pero que hoy ven en una mujer la luz de esperanza para seguir adelante en todos los aspectos de la vida, sin dejar de lado el compromiso que les asiste como actores dinámicos y vitales para seguir sacando a flote iniciativas que contribuyan al desarrollo del municipio.