La Policía Nacional durante once meses le siguió los pasos a esta organización logrando efectuar la materialización de varios hechos delictivos donde más de media tonelada de cocaína fue incautada, esto dio inicio a la investigación que permitió ubicar y controlar cada uno de los eslabones que conformaban la red narcotraficante.
Coordinados por “Willy” reunían y acopiaban el alcaloide en España donde la cortaban y dosificaban para su distribución en dosis a Francia, Italia, Alemania, Reino Unido y Países Bajos; hasta el viejo continente llegaba la droga a través de la contaminación de mercancías tipo exportación y adheridas a cajas metálicas de la estructura de las embarcaciones que salían desde el puerto de Buenaventura.
Estas modalidades ya habían sido identificadas por las autoridades, lo que obligó entonces a los narcos a desarrollar métodos de ocultamiento que les permitiera hacer sus envíos de droga sin ser detectados.
La red entonces reclutó a un experto químico para desarrollar polímeros y sintetizarlos artificialmente para la contaminación de mercancías a través de la impregnación.
“El Químico”, ejecutaba el ocultamiento tecnificado del estupefaciente, el cual era transportado a través de los terminales aeroportuarios de Cali, Bogotá y Pereira, además del puerto de Buenaventura con destino a España, se había tomado el tiempo necesario para desarrollar un elemento que fuera casi imperceptible por las autoridades, con delgadas capas de pintura hacia un llenado a las canecas plásticas que sirven para exportar pulpa de fruta, conservas mermeladas y líquidos a Europa, la droga se ocultaba en las paredes del envase y solo a través de un raspado se podía extraer la sustancia.
La misma organización lo enviaba luego en primera clase hasta el viejo continente donde se encargaba de extraer el alcaloide y cortarlo para aumentar su producción.
“Abel”, recepcionaba y acopiaba la cocaína y marihuana en bodegas e inmuebles de Buenaventura, posteriormente coordinaba la contaminación de contenedores y motonaves en el puerto.
De igual forma, fueron capturados “Javi” quien viajaba a los centros de producción en el departamento de Nariño para conseguir la droga que le era entregada all “químico” para iniciar el proceso de transformación a polímero; “Heiler” transportaba la sustancia hasta el puerto una vez las canecas estaban listas para iniciar el trasvasado de las pulpas y líquidos a exportar.
Cada uno de los eslabones de esta organización tenía funciones específicas, “El médico” se encargaba de conseguir los trailers que trasladaban las exportaciones por la ciudad portuaria, “Topo”, tres hombres más se movían por la ciudad avisando de la presencia de las autoridades, como campaneros sabían en qué momento ingresar la mercancía a los barcos.
Entre otras modalidades se pudo determinar durante el proceso de investigación que la red usaba pasantes con maletas contaminas (doble fondo), a través de los aeropuertos El Dorado de Bogotá, Matecaña de Pereira y Alfonso Bonilla de Cali.
Con la desarticulación de esta red narcotraficante se logra bloquear la economía criminal de la organización en 3 mil millones de pesos, también se descubre un sofisticado método de ocultamiento a través de la impregnación en polímero (caucho) adecuado en empaques de productos de exportación, así como la adhesión del estupefaciente en embarcaciones en las modalidades de “Parasito” o “Torpedo”.