Gracias al trabajo mancomunado de la Policía de Bogotá, la Alcaldía Mayor y la Secretaría de Seguridad, Convivencia y de Justicia, mediante labores de inteligencia quedó al descubierto una estructura dedicada a la venta de estupefacientes denominada ‘Los Nocopeo’ que venía afectando los entornos de cinco colegios y un parque en la localidad de Bosa. 

‘Los Nocopeo’ se habían encargado de generar reconocimiento mediante videos musicales que subían a las redes sociales como herramienta intimidatoria y haciendo apología al delito, mostrando en las grabaciones a niños manipulando armas de fuego. 

En los registros de los seguimientos se evidenció que el parque Bicentenario de Bosa era utilizado como su centro de distribución y a plena luz del día, sin importarles la presencia de menores de edad, comercializaban las dosis de marihuana. 

Para evadir los controles de la Policía, ocultaban los estupefacientes entre canecas de basura, además los enterraban en diferentes puntos del parque, que nunca perdían de vista para luego desenterrarlos y traficarlos.

Entre las pistas encontradas por los uniformados, se estableció el organigrama que tenía la estructura liderada por alias ‘Caco’, un hombre que se encargaba de recibir y administrar el alijo. Junto a él estaba su hermano alias ‘Henry’, quien se dedicaba a las labores administrativas, además de supervisar a los empacadores y distribuidores. 

El punto de acopio era el apartamento de una mujer a quien conocían como ‘Sonia’, quien a su vez estaba bajo las órdenes de otro sujeto con el remoquete de ‘Buchetula’, quien finalmente llevaba la droga al parque y la distribuía entre los expendedores. 

Otra mujer a quien le apodaban ‘La Negra’, era pieza fundamental de la estructura, pues escondía entre sus partes íntimas, el dinero producto del narcomenudeo que a diario les dejaba ganancias que superaban los 45 millones de pesos mensuales. 

Con esta información y tras varias órdenes de allanamiento se logró la captura de 10 personas y la vinculación de otras tres en el proceso, además fueron incautadas 8.192 dosis de marihuana, 278 dosis de coca y un arma de fuego.

Las 10 personas capturadas fueron puestas a disposición de las autoridades judiciales por los presuntos delitos de concierto para delinquir, fabricación, porte y tráfico de estupefacientes. Un juez los cobijó con medida de aseguramiento. 

Con estos resultados, la Policía Metropolitana de Bogotá reitera su compromiso con la comunidad y frente a las políticas de la Alcaldía Mayor y la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia, de continuar trabajando para reducir los delitos que afectan a los bogotanos.