Columna de opinión “Doctrina accionable para el control policial”

Brigadier General Luis Ernesto García Hernández.
  • Brigadier General Luis Ernesto García Hernández.

Los retos que han tenido los sectores público y privado producto del escenario pandémico, han puesto a prueba la capacidad de anticipación y toma de decisiones en el día a día de las organizaciones; ajustar de manera rápida los modelos de gestión requiere visión, criterio y conocimiento técnico que permita optimizar la inversión de todo tipo de recursos para lograr el impacto esperado.

A lo largo de la historia, en el mundo se han destacado dos modelos de gestión policial que caracterizan los enfoques de los cuerpos policiales: el modelo anglosajón orientado a garantizar la “seguridad ciudadana”, en el que los mandatos ciudadanos direccionan la actuación del cuerpo policial, y el enfoque continental europeo orientado a garantizar el mantenimiento del “orden público” a través del cumplimiento de los mandatos de gobierno; las características de nuestro sistema político ha permitido que en Colombia se configure un modelo de “gestión policial mixto” acorde  al centralismo estatal, al modelo de gerencia pública y al relacionamiento de las instituciones en lo subnacional.

El decreto 457 emitido por el presidente de la República mediante el cual se imparten instrucciones en virtud de la emergencia sanitaria generada por la pandemia del Coronavirus COVID-19, se constituye como el principal mandato de gobierno que permite garantizar el mantenimiento del “orden público”, éste último entendido como la armonía de derechos, deberes, libertades y poderes dentro del Estado (Interpretación de la Corte Constitucional).

El escenario actual ha conllevado a que la Policía Nacional reconfigure su modelo de gestión de manera rápida, con el fin de garantizar el mantenimiento del orden público en el marco de la declaratoria de emergencia sanitaria, estableciendo una doctrina accionable, a través de la cual se establecen protocolos de actuación para la interacción social e intervención en el territorio con estándares de bioseguridad, exigiendo con alto criterio el cumplimiento de las normas a los ciudadanos.

La aplicación de comparendos digitales por incumplimiento del pico y cédula, celebración de audiencias virtuales de control de legalidad de captura por incumplimiento de medidas sanitarias, reconfiguración de los turnos de vigilancia, patrullaje individual de policías en motocicletas, establecimiento de puestos de control con estrictas medidas y procedimientos de bioseguridad, y el cambio en la forma de comunicar son algunos de los ajustes doctrinarios que garantizarán que el control policial sea oportuno y pertinente, y que se configure como pieza fundamental para superar el difícil momento que vive nuestra sociedad producto de la pandemia.

Comandante Policía Metropolitana Bucaramanga.

Fuente: https://www.elfrente.com.co/web/index.php?ecsmodule=frmstasection&ida=55&idb=102&idc=49121