En un torbellino de angustia y esperanza, la comunidad se unió a la Policía Nacional en una búsqueda frenética, impulsada por el amor y la solidaridad. Fue así como, en un acto de heroísmo silencioso, Germán Loret Medrano regresó a los brazos de su familia, en un verdadero milagro tejido con hilos de fe y compasión.
En el barrio Nelson Mandela de Cartagena, la preocupación se apoderó de los vecinos cuando Germán, un adulto mayor de 72 años diagnosticado con Alzheimer, desapareció misteriosamente. Durante cuatro días de angustia, familiares y amigos lo buscaron sin descanso, temiendo lo peor.
La noticia de su desaparición se extendió rápidamente por todo el departamento de Bolívar, movilizando a las autoridades y a la ciudadanía en una intensa búsqueda. Sin embargo, la historia tuvo un giro inesperado en el municipio de San Estanislao de Kostka, donde una patrulla de la Policía Nacional encontró a Germán desorientado y caminando por las calles.
Los uniformados, encabezados por el subintendente José Pacheco, le brindaron atención inmediata: le ofrecieron alimento, resguardo y acompañamiento, demostrando el compromiso y la humanidad que caracterizan a la Institución. Luego, iniciaron una minuciosa labor para ubicar a sus familiares, quienes, según el propio Germán, residían en Cartagena.
Gracias a la rápida articulación con unidades de la Policía Metropolitana de Cartagena y a la difusión de la fotografía del adulto mayor en redes sociales, la comunidad se unió a la causa y compartió la información hasta lograr que su familia conociera su paradero.
Fue así como se produjo un emotivo reencuentro, lleno de lágrimas y gratitud.
“Agradezco a la Policía que lo encontró y le brindó comida y un techo”, expresó su hija Karina Loret Silgado.
El coronel John Edward Correal Cabezas, comandante (e) de la Policía de Bolívar, destacó la labor de los uniformados:
“Lo que hizo el subintendente José Pacheco y su equipo es lo que verdaderamente significa servir. No se rindieron ni dudaron, y gracias a ese liderazgo hoy contamos una historia que parecía destinada a la tragedia, pero terminó como un milagro”.
Este caso refleja la esencia de la estrategia institucional “Seguros, Cercanos y Presentes”, que busca fortalecer el vínculo entre la Policía y la ciudadanía.
Más allá de su misión de proteger la seguridad, la Policía Nacional demostró una vez más que también es guardiana de los lazos familiares y del valor más grande de todos: la vida.