En desarrollo del plan de choque, “el que la hace la paga”, seguridad con legalidad, La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, en las últimas horas tras un proceso investigativo durante seis meses por parte de funcionarios de la seccional de investigación judicial e Interpol Sijin y la Seccional de Inteligencia Sipol, logró la desarticulación del grupo delincuencial “el amarillo” que delinque en el barrio Belén San Bernardo de Medellín.
Rentas criminales por 1.800 millones de pesos anuales, eran obtenidos de la venta de marihuana, clorhidrato de cocaína y base de cocaína, entre otras drogas, principalmente mediante la modalidad de servicio a domicilio y también en vía pública, con lo cual los integrantes del grupo delincuencial “el amarillo” venían afectando los entornos escolares de tres instituciones educativas y una universidad en la comuna 16 Belén de Medellín.
Vigilancias, interceptaciones y seguimientos hicieron parte del proceso que permitió judicializar a 17 personas, quienes llevaban tres años en la organización criminal y fueron capturados por los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado y concierto para delinquir. Se presume que, entre los capturados, está el cabecilla conocido en el mundo criminal como “moyano”, el recolector del dinero producto del ilícito, dos expendedores a domicilio que se movilizaban en motocicletas y 13 expendedores callejeros, uno de ellos una mujer. Es de resaltar que dos de los capturados son esposos.
Para la comercialización de la droga mediante domicilios estos delincuentes utilizaban tres puntos móviles en el barrio Belén San Bernardo, en los cuales convenían el punto de entrega de la droga con los clientes reconocidos o recomendados, principalmente en las afueras de una universidad. También eran contactados vía celular.
En la interceptación de una de las líneas telefónicas de estos expendedores se puede escuchar cuando un estudiante universitario lo llama y le encarga dosis de cocaína y marihuana para una fiesta, las cuales solicita con palabras claves como “camisa café” y “camisa blanca”, términos empleados para no despertar sospechas de las autoridades.
En las 16 diligencias de allanamiento y registro les fueron incautados un total de $1.693.000 en efectivo, 148 gramos de marihuana, 41 gramos de cocaína, 6 gramos de bazuco, 10 pastillas de rivotril y 2 celulares. Además, les fueron inmovilizadas dos motocicletas con fines de comiso.
16 de los capturados son reincidentes en el delito, ya que presentan antecedentes de capturas por el delito de porte y tráfico de estupefacientes en la misma zona donde fueron capturados en el desarrollo de esta investigación.
Para el desarrollo del proceso investigativo fue fundamental la información recibida por fuente humana y por la comunidad, la cual resaltamos, porque permite desarticular organizaciones delincuenciales dedicadas a la comisión de delitos en el Valle de Aburrá.