Archipiélago de San Andrés, San Andrés
Lunes, 29 de Julio de 2019
Desarticulado grupo delincuencial organizado: 8 capturas en 3 ciudades del país.

La Policía Nacional, a través de la Dirección de Investigación Criminal e INTERPOL, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación y la oficina de la Agencia Federal de Investigación (FBI) en Miami, desarrolló un completo proceso investigativo durante dos años y medio, en contra de una estructura criminal que enviaba el alcaloide desde el interior del país hacia la Isla de San Andrés, Centroamérica, Estados Unidos y Europa.

El despliegue de acciones operacionales, en desarrollo del plan choque ‘Construyendo Seguridad’ y la Estrategia Integral Contra el Narcotráfico, permitió asestar un golpe contundente a un Grupo Delincuencial Organizado dedicado al tráfico de cocaína desde Colombia hacia el exterior.

La modalidad delictiva de la organización criminal transnacional iniciaba en el departamento de Cauca, donde utilizaban ‘pasantes’ para transportar el alcaloide en fajas camufladas o ingerido hasta la ciudad de Bogotá. Una vez acopiada la cocaína en la capital del país, nuevamente los ‘correos humanos’ la ingerían en dediles que alojaban en su estómago. Para desviar la atención de las autoridades en las terminales aéreas, utilizaban la fachada de familias que viajaban en calidad de turistas, incluso con la compañía de menores de edad.

A través de diferentes actividades investigativas, se logró recolectar suficiente acervo probatorio que permitió inferir que esta red criminal coordinó varios envíos del alcaloide en los últimos años: en desarrollo de los seguimientos se han efectuado 14 capturas de los denominados ‘correos humanos’ desde 2016. Así mismo, verificados los ingresos a la isla, se pudo establecer que hubo pasantes con más de 30 ingresos al Archipiélago. 

En el marco de las rutas internacionales, la red contaba con pasantes que tenían el objetivo de salir del país hacia Madrid (España) y San Salvador con cerca de 1.300 gramos de cocaína ingeridos. 

El trabajo, liderado por la Dirección de Investigación Criminal e INTERPOL (DIJIN) de la Policía Nacional, permitió establecer los roles de cada uno de los integrantes de la organización criminal, por lo cual la Fiscalía General de la Nación encontró los suficientes motivos que permitieron solicitar ante un juez de control de garantías las órdenes de captura contra ocho personas, señaladas como responsables de la cadena de tráfico de estupefacientes para la adquisición, transporte y ocultamiento del alcaloide.

En los últimos días, se materializaron estas detenciones por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes yconcierto para delinquir. Cuatro de ellas se realizaron en Bogotá, el cabecilla fue ubicado en el municipio de Armero Guayabal (Tolima) y dos más en la Isla de San Andrés. Se trata de los hombres conocidos como ‘John’ y ‘Álvaro’, residentes y quienes tenían la misión de acopiar el alcaloide para distribuirlo entre los habitantes del territorio insular, lo que ha llevado a que algunos jóvenes se vean involucrados en la ocurrencia de otros delitos, entre ellos las lesiones personales y el hurto.

Por su parte, el líder de la organización capturado, conocido como el ‘Llanero’, era el financiador, reclutador y transportador de la cocaína. Igualmente, las mujeres conocidas como ‘Angie’, ‘Leticia’ y ‘Mery’ se encargaban de transportar el alcaloide. Elas eran reconocidas en la estructura por su capacidad de transportar hasta cerca de 1.500 gramos del alcaloide divididos en dediles de 15 gramos cada uno. 

El coronel Jorge Antonio Urquijo Sandoval, comandante de la Policía Nacional en el Departamento Archipiélago, resaltó el importante resultado operativo que permite poner a buen recaudo de las autoridades a toda la organización entre ellos los hombres conocidos como ‘Jhon’ y ‘Álvaro’, ciudadano residentes en las islas que dentro de la estructura se encargaban de acopiar el estupefaciente y distribuirlo entre los habitantes del territorio insular. Esta problemática ha llevado que jóvenes se vean involucrados en la ocurrencia de otros delitos, entre ellos las lesiones personales y el hurto.