En el marco del Plan de Movilidad y Seguridad de Semana Santa “Juntos Construimos Convivencia y Seguridad”, el Departamento de Policía Meta a través del Grupo de Carabineros y Guías Caninos, realizó una serie de planes y controles en sitios públicos, plazas de mercado y agencias intermunicipales del Meta, para verificar las condiciones de salubridad y tallas mínimas del pescado que se está comercializando.
‘Con este Plan para la Semana Mayor, también hemos velado por la venta de alimentos en óptimas condiciones para el consumo humano’, indicó el señor coronel Jorge Rodríguez Castellanos, comandante del Departamento de Policía Meta encargado.
Durante los procedimientos adelantados en el municipio de Fuentedeoro, se realizó la incautación de 177 kilogramos de pescado seco, los cuales eran comercializados por dos mujeres y un hombre de edades 38, 42 y 54 años respectivamente, sin cumplir lo establecido en la Ley 9 de 1979 donde se reglamentan las medidas sanitarias.
Este pescado avaluado en un millón 239 mil pesos, fue dejado a disposición de la Inspección de Policía Municipal.