La Policía Nacional de Colombia, en desarrollo del Plan Choque “el que la hace la paga”, fase IV “Operaciones para la reducción del delito”, tras el despliegue de un proceso de inteligencia e investigación, en las últimas horas logró la captura de quien es conocido en el mundo criminal como ‘piolo’, segundo cabecilla del grupo delincuencial ‘el mesa’ uno de los principales dinamizadores de la criminalidad en el municipio de Bello.
Con toda la capacidad institucional por aire y tierra llegamos hasta la vereda Ancón del municipio de Copacabana Antioquia, donde en una finca fue ubicado y capturado este hombre, quien tenía una orden de captura vigente por el delito de concierto para delinquir agravado, y quien además hacía parte de los delincuentes más buscados del municipio de Bello.
Con más de 20 años de trayectoria criminal ‘piolo’, luego de desmovilizarse del “bloque mineros” de las extintas autodefensas, pasó a integrar el grupo delincuencial común organizado ‘el mesa’, en el cual tras el paso de los años llegó a ser uno de los hombres de confianza del principal cabecilla de esta estructura criminal conocido como ‘el montañero’.
Como cabecilla de segundo nivel del grupo delincuencial ‘el mesa’, ‘piolo’ sería el responsable de homicidios selectivos en Medellín y Bello, Antioquia, producto de las confrontaciones con el grupo delincuencial organizado ‘pachelly’, por el control de rentas criminales, principalmente de la extorsión y el tráfico de sustancias estupefacientes. Actualmente ‘el mesa’ ejerce presencia criminal en los barrios El Mesa, Buenos Aires, Prado, Panamericano, Paraíso, Briceño, El Cairo, Andalucía y Las Granja del municipio de Bello.
Según las investigaciones, el hoy capturado consolidó empresas fachada, las cuales se ubican en el municipio de Bello, sector El Tapón y en el barrio Aranjuez de Medellín, para el manejo de finanzas ligadas a rentas criminales obtenidas por ‘el mesa’. Además, estaría legalizando el dinero producto de actividades ilícitas mediante la adquisición de propiedades como apartamentos y fincas lujosas en condominios del área metropolitana, las cuales son utilizadas por los cabecillas para coordinar reuniones con fines criminales.
Dentro de los alcances de ‘piolo’ estaba el reclutamiento de integrantes para la organización delincuencial, quienes son enviados a la ciudad de Bogotá para el control de expendios de estupefacientes, la comisión de otros delitos contra otras estructuras criminales y la expansión de la economía criminal.
En la actualidad ‘piolo’ controlaba en la zona norte de Antioquia laboratorios para la producción de estupefacientes, para lo cual mantenía alianzas criminales con quien se hace llamar ‘cabuyo’ cabecilla del grupo armando organizado residual GAO-r E36 con injerencia en los municipios del norte de Antioquia. Además, tendría intensiones de afianzar la producción y el tráfico internacional de cocaína con otras estructuras residuales.
