Michael Stiven Trujillo Henao

En cumplimiento de la estrategia institucional “Actuando por Antioquia”, y gracias a labores de patrullaje, registro y control adelantadas por uniformados adscritos a la Estación de Policía Betulia, se logró la captura de dos presuntos integrantes del Grupo de Delincuencia Común Organizada (GDCO) conocido como “20 de Julio”.
Los hechos se presentaron el 3 de mayo de 2025, a las 04:00 p.m, en el barrio Nariño del municipio de Betulia, donde fueron capturados alias 'El Zarco', quien presuntamente se desempeñaba como coordinador de la estructura.; asimismo, alias 'Matraca', señalado de actuar como campanero y mensajero para la misma organización delincuencial.
Durante el procedimiento se incautaron los siguientes elementos:
• Un arma de fuego tipo revólver, calibre 38, con número de serie externo limado.
• 21 cartuchos, calibre 38.
• 03 cartuchos, calibre 5.56 mm.
• Un cartucho, calibre 9 mm (aparentemente percutido).
• Un celular.
• Un uniforme pixelado y 01 guerrera del Ejército Nacional.
• 13 bolsas herméticas con una sustancia vegetal con características similares a la marihuana.
Los capturados fueron dejados a disposición de la Fiscalía Local 050 de Concordia,
por los delitos de:
• Fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones (Art. 365 del C.P.)
• Utilización ilegal de uniformes e insignias (Art. 346 del C.P.)
• Tráfico, fabricación o porte de estupefacientes (Art. 376 del C.P.)
Este resultado fortalece la ofensiva contra las estructuras criminales en el suroeste antioqueño, reafirmando el compromiso de la Policía Nacional con la seguridad ciudadana y la convivencia pacífica. Las autoridades continúan adelantando acciones preventivas y operativas que garanticen la tranquilidad de los habitantes del municipio de Betulia.
La Policía Nacional, en la defensa permanente de la vida de nuestros ciudadanos, y gracias a una información aportada por fuente humana, lleva a cabo en la capital risaraldense, en el barrio La Paz de la ciudad de Pereira, la captura de un sujeto conocido con el alias del 'Costeño', por el delito de homicidio.
Este hombre sería el responsable de una afectación a la vida, presentada el día 16 de abril del presente año en el barrio La Paz de la capital risaraldense, posterior a una riña presentada entre una persona dedicada al reciclaje y el dueño de una chatarrería.
Por otra parte, en vía pública, es capturado un ciudadano de 37 años, natural de Pereira, conocido como 'Arrubla', por el delito de homicidio, por hechos presentados el día nueve de febrero del año 2009, donde el día de los hechos, pierden la vida dos hombres al interior de un establecimiento comercial.
Ambas personas fueron presentadas ante la autoridad judicial correspondiente, donde el sujeto conocido como el costeño fue cobijado con medida de detención intramural y la otra persona es privada de la libertad en su lugar de residencia.
Este resultado responde al compromiso de la institución por garantizar la seguridad y convivencia de los habitantes del área metropolitana de Pereira; a su vez, invitamos a nuestros ciudadanos a que nos informen de manera oportuna cualquier actuación que afecte la convivencia y seguridad ciudadana, a través de la línea única de emergencias 123, o a los números de celulares 3143587212 de la Seccional de Inteligencia Policial y 3203057117 de la Seccional de Investigación Criminal.
En el marco de la Estrategia Plan Cazador, uniformados de la patrulla de vigilancia, tres, adscritos al CAI Morasurco, lograron la captura en flagrancia de un ciudadano por el delito de hurto.
El procedimiento se llevó a cabo en el sector de Las Cuadras, donde, mediante actividades de patrullaje, registro y control, se logró interceptar al individuo, quien minutos antes había cometido un robo con arma blanca, despojando a la víctima de un celular. El equipo fue recuperado por las autoridades.
El capturado fue dejado a disposición de la Fiscalía General de la Nación para su respectiva judicialización.
La Policía Nacional reafirma su compromiso con la seguridad ciudadana y continúa fortaleciendo sus estrategias operativas para preservar la tranquilidad de la comunidad.
Donde el sol calienta y el viento del Caribe parece barrer las penas, hay un hombre que desafía la rutina del uniforme con algo más poderoso que las órdenes: la compasión. Su nombre es Fulbio Andrés Sosa Charrasquiel, mayor de la Policía Nacional, cordobés de origen y barranquillero por adopción. Desde hace 16 años sirve a la Policía Nacional, pero en la Región de Policía No. 8, donde hoy labora, se ha ganado un título que no figura en los manuales: el de "ángel azul" de los niños con espectro autista.
En medio de la pandemia, cuando la incertidumbre reinaba en las casas y los parques guardaban silencio, el mayor Sosa decidió no quedarse quieto. Mientras otros temían el contagio, él se blindó con tapabocas, guantes y desinfectante, y comenzó a recorrer las calles de “la Arenosa” con un solo objetivo: llevarle alegría a los hijos de sus compañeros policías y a niños de la comunidad diagnosticados con TEA. En lugar de armas, cargaba juguetes didácticos, libros, pelotas. Tocaba puertas, saludaba con la mirada y dejaba en cada hogar un respiro en medio del aislamiento.
Pero ese impulso de bondad no se detuvo cuando terminó la emergencia sanitaria. Hasta el día de hoy, muchos de esos niños siguen recibiendo sus visitas. Ahora, el fútbol se ha convertido en su herramienta para unir, concienciar y sembrar empatía. A través de campeonatos simbólicos y actividades lúdicas, Sosa busca educar a la sociedad sobre la importancia del acompañamiento y el respeto a las diferencias.
Algunos gestos se vuelven inolvidables. Como el caso de Elkin Gallor, un niño con atrofia cortical, hijo del subintendente Elkin Gallor Álvarez, adscrito a la Policía Metropolitana de Barranquilla. Fulbio, movido por la voz de una madre y el sueño de un niño, gestionó una silla de ruedas especializada y lo llevó a conocer el mar Caribe. Hasta las playas de Puerto Colombia llegó aquel pequeño, acompañado por su madre, a sentir la brisa que muchos dan por sentada, pero que para él fue una caricia del alma.
Y como si eso fuera poco, protagonizó una escena que bien podría haber salido de un realismo mágico costeño: el día que una tanqueta del UNDMO irrumpió en el barrio San Salvador no para controlar disturbios, sino para cumplir un sueño. La comunidad miraba atónita cómo de una camioneta bajaban comerciantes y policías cargando una piscina que sería instalada en la terraza de la casa del pequeño Duván, un niño con autismo que soñaba con nadar. La tanqueta, en vez de disparar agua para dispersar, llenó de alegría aquella piscina recién estrenada. Fue, sin duda, un operativo de amor.
Son estos gestos los que no salen en los informes estadísticos, pero que marcan vidas enteras. Porque el mayor Fulbio Sosa ha hecho de su carrera un acto de servicio con alma, de esos que no se aprenden en la escuela policial, sino en las esquinas del corazón. A diario demuestra que servir también significa escuchar, tender la mano y acompañar los silencios.
En la Barranquilla que baila y resiste, en esa ciudad que lo ha adoptado con cariño, Fulbio Sosa se ha convertido en símbolo de humanidad. Un policía que no necesita medallas porque su mayor mérito es haber entendido que la verdadera seguridad comienza cuando alguien se siente amado, visto y respetado.
Y así, bajo el sol de “Barranquilla”, sigue caminando este mayor de los corazones. Sin más escudo que su vocación, y con un azul que no solo viste su uniforme, sino que brota de su alma.
Durante labores de patrullaje y control realizadas en la vía principal del Barrio Niza, uniformados adscritos al CAI Granada, bajo el indicativo de patrulla de vigilancia 37, recuperaron una motocicleta reportada como hurtada y capturaron a un ciudadano involucrado en el hecho.
El operativo se llevó a cabo cuando los uniformados hicieron la señal de "PARE" a una motocicleta, de color blanco, rojo y negro. El conductor fue abordado y, tras practicarle un registro personal, se le solicitó la documentación del vehículo. El ciudadano manifestó no poseer ningún documento que acreditara su propiedad.
Ante esta situación, se solicitaron antecedentes al personal de automotores de la Seccional de Investigación Criminal, quienes confirmaron que la motocicleta presentaba un reporte activo por hurto, bajo la modalidad de atraco.
De inmediato, se le informaron al ciudadano los derechos que le asisten como persona capturada y fue dejado a disposición de la autoridad competente para el respectivo proceso judicial.
La motocicleta recuperada está avaluada en $10.000.000, representando un importante resultado en la lucha contra el hurto de automotores en la ciudad. La Policía Nacional reafirma su compromiso con la seguridad ciudadana y continúa trabajando por recuperar la tranquilidad de todos los habitantes.